Translate

jueves, 30 de noviembre de 2017

TRATAMIENTO CONTRA LA TRICOMIASIS


aunque la tricomiasis suele ser una enfermedad muy sencilla de tratar si se toman los antibióticos adecuados, no suelen haber casos de curación espontánea. Además, es imprescindible curar esta enfermedad ya que con ella aumentan las posibilidades de contraer otras ETS.

El antibiótico que se utiliza en este caso se llama metronidazol, y se puede administrar de varias formas según opine el médico: tomando dos dosis diarias durante 5-7 días (es la forma más común), administrando el medicamento en una sola dosis, o en forma de óvulos, que es como se llaman las pastillas de vía vaginal.



A la hora de someterse al tratamiento es necesario que todas las parejas sexuales del paciente también lo reciban para evitar el contagio a otras personas. Para esto, el médico puede recetar una dosis de más para la pareja. 
Por otro lado, es necesario evitar las relaciones sexuales durante la semana siguiente al tratamiento, porque el medicamento tarda en hacer efecto. 
Finalmente, hay que hacer saber al paciente que la tricomiasis se puede volver a contraer, por lo que es necesario mantener relaciones seguras y realizarse las pruebas periódicas.

Finalmente, el metronidazol tiene una serie de efectos secundarios sobretodo relacionados con problemas gastrointestinales: gases, vómitos, o diarrea. Para evitarlos es recomendable tomarse los medicamentos con el estómago lleno. 



SÍNTOMAS DE LA TRICOMONIASIS

La mayoría de las personas que padecen esta enfermedad no muestran síntomas. Si presentan síntomas estos aparecen entre 5 y 28 días después de la infección.

En el caso de las mujeres presentan una serie de síntomas entre los que están:

  • Secreción vaginal verdosa o amarillenta
  • Molestia durante las relaciones sexuales
  • Olor vaginal
  • Dolor al orinar
  • Picazón dentro o alrededor de la vagina

Esta enfermedad puede causarles vaginitis, los síntomas de esta vaginitis causada por la tricomoniasis son:

  • Flujo vaginal verde, amarillo, gris, espumoso y maloliente
  • Sangre en tu flujo vaginal
  • Prurito e irratación en y alrededor de la vagina
  • Hinchazón alrededor de los genitales
  • Dolor durante el sexo



En el caso de los hombres, la mayoría no presenta síntomas y en el caso de tener síntomas estos suelen ser:

  • Secreción blanquecina del pene
  • Dificultad para orinar
  • Dificultad para eyacular



Los signos de esta infección pueden ser casi imperceptibles o muy dolorosos e irritantes. Es común que los síntomas aparezcan y desaparezcan, sin embargo, eso no quiere decir que la infección haya desaparecido. 

LA TRICOMONIASIS


La tricomoniasis es una enfermedad de transmisión sexual causada por un parásito protozoario conocido como Trichomonas vaginalis. Los síntomas característicos de esta infección son muy  variables y las personas infectadas pueden no darse cuenta de que lo están. Esta ETS se considera como la enfermedad de transmisión sexual más común. Hoy en día se calcula que en EEUU, la tricomoniasis afecta a 3.7 millones de personas pero solo un 30% sabe que la tiene. Es más frecuente en mujeres y en personas mayores que en jóvenes. 


Este tipo de parásito se transmite mediante las relaciones sexuales, en mujeres la zona que más frecuentemente sufre esta infección es la parte baja del aparato genital y en hombres es la parte interna del pene. Durante las relaciones sexuales este parásito se transmite más frecuentemente del pene a la vagina o viceversa, pero también puede ser de una vagina a otra. Al contrario que otras ETS no es frecuente que el trichomonas vaginalis afecte a otras partes del cuerpo como las manos, la boca o el ano. No se conoce con seguridad por que algunas personas presentan síntomas y otras no, pero normalmente se asocia a la edad, el estado de salud general de la persona, pero aunque no presenten síntomas estas personas pueden transmitir la enfermedad a otros. 


TRATAMIENTO DE LA CANDIDIASIS VAGINAL



La candidiasis vaginal es un tipo de infección de enfermedad de transmisión sexual, y está causada por el hongo cándida, generalmente la Candida albicans. Aunque es una enfermedad de transmisión sexual, normalmente se origina dentro de la propia persona generalmente en el tracto gastrointestinal, lo que causa que mujeres vírgenes o que no han tenido relaciones sexuales durante mucho tiempo, pueden sufrir de candidiasis.

Va a haber distintos tratamientos para distintos tipos de candidiasis, el primero del que vamos a hablar es el tratamiento para un candidiasis no complicada. Para que sea considerada una candidiasis no complicada debe seguir las siguientes características, no presentar síntomas severos, no sufrir más de 3 episodios al año, se presenta en mujeres sanas y no embarazadas, entre otras. Algunos de los medicamentos más utilizados para tratar este tipo de candidiasis son : fluconazol en tableta 150 mg, cotrimazol que se puede administrar en tableta o en crema, miconazol en crema o en óvulo, terconazol en crema o en el óvulo. 

Dentro de los otros tipos de candidiasis encontramos la candidiasis vaginal complicada que a su vez tiene varios subtipos de candidiasis  con distintos tipos de tratamientos para cada uno. El primero del que vamos a hablar es la candidiasis vaginal recurrente, el tratamiento más adecuado para este tipo de candidiasis es el fluconazol de 150 mg por vía oral, tomando 3 dosis en un período de 72 horas. Al final de esto se va a seguir tomando el fluconazol una vez a la semana durante 6 meses. Otro tipo de candidiasis es la candidiasis vaginal con síntomas intensos, que como la anterior, se va a tratar con fluconazol de 150 mg tomando 3 dosis en un periodo de 72 horas. Finalmente vamos a hablar de la candidiasis durante el embarazo, en este caso el tratamiento debe tratarse por vía intravaginal, en este caso el cotrimazol y el miconazol durante 7 días son los medicamentos más utilizados.



        

miércoles, 29 de noviembre de 2017

SIGNOS Y SÍNTOMAS DE LA CANDIDIASIS 

El prurito en la vulva y vagina (picor), es el síntoma más frecuente e importante de la candidiasis, aunque también puede aparecer ardor y dolor en el área vaginal, acompañados de disuria.Por otro lado, puede aparecer enrojecimiento vulvar y aumento del flujo vaginal de tipo lechoso e inhodoro. Estos síntomas pueden empeorar en los días previos a la menstruación.

Aunque muchas mujeres acuden al ginecólogo pensando que por sus picores tienen por candidiasis, solamente es un 50% de ellas las que realmente tienen esta enfermedad. 
Esta, solamente puede ser diagnosticada con seguridad mediante pruebas de laboratorio. Para ello, se debe tomar una muestra del flujo de la pared vaginal con un hisopo.



En cuanto a la candidiasis oral, se observan lesiones aterciopeladas y blanquecinas en lengua y boca. Por debajo de estas lesiones, hay tejido enrojecido que sangra fácilmente. El paciente suele sentir la boca muy seca.



CANDIDIASIS VAGINAL

La candidiasis es una infección causada por una levadura (hongo) llamada Candida. Esta normalmente vive dentro del organismo, en lugares como la boca, la garganta, el intestino o la vagina pero también la podemos encontrar en la piel. A veces la Candida puede multiplicarse y provocar una infección si el ambiente dentro de la vagina cambia de una manera que fomenta su crecimiento. La candidiasis en la vagina se conoce como ``infección vaginal por hongos´´.




Cabe destacar que el hongo aunque esté en el organismo la mayoría de las veces no ocasiona infección ni síntomas.

La Candida junto con otros microorganismos que suelen vivir en la vagina se mantienen mutuamente en equilibrio pero en ocasiones la cantidad de este hongo aumenta haciendo que se presente una candidiasis. Esto puede ocurrir si la mujer:


  • Está tomando antibióticos usados para tratar otras infecciones ya que estos modifican el equilibrio normal entre los microorganismos de la vagina
  • Está embarazada
  • Es obesa
  • Tiene diabetes



La candidiasis no se contagia por contacto sexual, sin embargo, algunos hombres pueden presentar síntomas como prurito o erupción en el pene tras en contacto sexual con una mujer infectada.
Si se contrae muchas veces esta infección, esto puede ser un signo de que existen otros problemas de salud por lo que es conveniente consultar a un especialista.

martes, 28 de noviembre de 2017

TRATAMIENTO DEL HERPES GENITAL



El herpes genital es una infección de transmisión sexual de tipo vírico que se puede curar con una serie de medicinas, estas permiten aliviar el dolor y la molestia ya que sanan las úlceras de manera más rápida. Sin embargo estas parecen sanar mejor en el brote inicial que en los posteriores. Estas medicinas se conocen como aciclovir y también el valaciclovir, que hay que mencionar que pueden causar efectos secundarios.

Si se da la situación de que sean brotes repetitivos se debe de tomar la medicina en cuanto se sienta un hormigueo, ardor o picazón, o en cuanto aparezcan ampollas. Las personas que tienen este tipo de brotes reincidentes pueden tomar las medicinas diariamente durante cierto tiempo, lo que puede prevenir o acortar la duración de los bloques, y también permite reducir las probabilidades de transmitir la infección a otras personas. 

Las mujeres embarazadas que tengan esta ETS se pueden tratar pero solo en el último mes del embarazo, lo que va a reducir la probabilidad de sufrir un brote en el momento del parto, si se da la situación de que haya un brote en el momento del parto se recomienda realizar una cesárea ya que esto va a reducir las posibilidades de que afecte al bebé.


SIGNOS Y SÍNTOMAS DEL HERPES GENITAL

El signo más frecuente de herpes son las llagas en boca o genitales, aunque muy frecuentemente no aparecen ningún tipo de signo ni síntoma, o se pueden confundir con otros problemas como gripe, granos o pelos encarnados. Además, estos síntomas pueden aparecer y desaparecer con el tiempo cosa que puede hacer pensar a la persona que está curada; esto no es cierto ya que una vez contraído, este permanece en el cuerpo de por vida.

Como hemos dicho anteriormente, el herpes genital puede provocar ampollas dolorosas que provocan picor en vulva, pene, vagina, útero, ano, e incluso las nalgas y el útero. Cuando estas ampollas explotan, pueden variar a llagas.
Por otro lado, el paciente puede sufrir ardor o dificultad al orinar, picazón y dolor en el área genital. Si el herpes está causado por un tipo específico, tambíen se pueden presentar síntomas similares a una gripe (inflamación de las glándulas, fiebre, escalofrios, dolor de cabeza, cansancio)

Los primeros síntomas de herpes genital suelen aparecer alrededor de los 2 a 20 días de exponerse a la infección, y dura aproximadamente 4 semanas. A partir de este momento pueden aparecer rebrotes, sobre todo en el primer año después de contraer la enfermedad. Estos rebrotes suelen ser más cortos y menos dolorosos que el primero.
Finalmente, cabe señalar que estos síntomas empeoran en personas con otras enfermedades como el VIH.

En cuanto a los orpes bucales, suelen ser menos dolorosos y molestos. Suelen aparecer llagas en labios y alrededor de la boca que duran un par de semanas, pero que pueden reaparecer a lo largo de la vida. 
Cabe señalar, que aunque estas son molestas, solamente son peligrosas para los neonatos

HERPES GENITAL

El herpes es una infección muy común que permanece en el cuerpo de por vida. Esta enfermedad está causada por dos virus diferentes que tienen una cierta similitud: el herpes simple tipo 1 (VHS-1) y el herpes simple tipo 2 (VHS-2). Estos pueden causar llagas en la vulva, la vagina, el cuello uterino, el ano, el pene, el escroto, las nalgas, los muslos, los labios, la boca, la garganta e incluso en los ojos.




El herpes genital se contagia por el contacto sexual, tanto por sexo vaginal, oral como anal pero también se contagia al besarse. El contagio se produce cuando los genitales o la boca de una persona entra en contacto con los genitales o la boca de otra persona que está infectada. 
El herpes se puede transmitir aunque el pene o la lengua no penetren completamente en la vagina, el ano o la boca. No es necesario eyacular para contagiar el herpes, basta un rápido contacto de piel con piel.

Este virus también se puede transmitir por otras vías. Por ejemplo, cuando un padre besa a su hijo en los labios, de hecho, la mayoría de las personas con herpes oral se contagiaron cuando eran pequeños. Además, la madre puede transmitir el herpes genital al hijo durante el parto vaginal, aunque no es muy habitual.

También se puede propagar al tocar la llaga y luego tocar la boca, los genitales o los ojos sin lavarse las manos. El herpes es más contagioso cuando hay llagas abiertas y húmedas, puesto que la secrección de las llagas propaga facilmente el virus.



Estos brotes de ampollas o llagas dolorosas pueden provocar picazón. 
Cabe destacar que el herpes se puede transmitir aun cuando no existen llagas o síntomas y esto es importante porque hay personas que no saben que están infectadas y aún así están transmitiendo la enfermedad.

El herpes no tiene cura pero existen fármacos que reducen los síntomas y que disminuyen las posibilidades de contagiar el virus a otras personas. Con el paso del tiempo, los brotes de herpes se van haciendo menos frecuentes y aunque este puede ser doloroso e incómodo, no es peligroso. Las personas que padecen esta enfermedad tienen relaciones sexuales y llevan una vida totalmente normal y sana.



lunes, 27 de noviembre de 2017

TRATAMIENTO PARA EL VPH


El VPH o virus del papiloma humano, es un tipo de ETS que puede causar verrugas en diferentes partes del cuerpo. Primero hablaremos de como se tratan estas verrugas. El tratamiento para este tipo de infección comienza con la aplicación tópica de podofilina al 0,5% encima de la verruga, que puede ser de aplicación propia, durante dos veces al día, durante tres días, luego se dejarán cuatro días de reposo, y se podrá repetir este ciclo hasta en cuatro ocasiones más. Luego se realizará la aplicación tópica de Imiquimod,  que se trata de un fármaco inmunomodulador que actúa activando las células del sistema inmunológico que van a atacar y a destruir el virus. Finalmente se va a aplicar ácido tricloroacético al 80-90%, este tipo de sustancia es un ácido muy fuerte que solo se debe de aplicar de forma tópica con un aplicador en la zona de la lesión por un médico especialista, este tratamiento se va a repetir una vez a la semana hasta eliminar la lesión. Otras formas de eliminación de estas verrugas es la utilización de nitrógeno líquido para eliminarlas.




Ahora vamos a mencionar diferentes maneras de como tratar las lesiones del cuello uterino, que es una lesión que puede conllevar esta infección en mujeres. La primera es la crioterapia, se va a congelar el tejido usando una sonda metálica que fue enfriada con óxido nitroso o CO2 que se encuentra circulante dentro de la sonda. Otra es la conización en frío con bisturí, este método consiste en la eliminación del tejido afectando utilizando un bisturí. 

Por ultimo vamos a mencionar el método de la microinmunoterapia para tratar el VPH, este método se utiliza en todo el mundo desde hace 35 años con resultados buenos. Este tipo de tratamiento consiste en un sistema terapéutico efectivo contra cualquier enfermedad, mediante la cooperación con el sistema inmune. 



SIGNOS Y SÍNTOMAS DEL VPH

Las verrugas genitales son el signo más visible del VPH, aunque no siempre aparecen ya que solamente algunos tipos de este virus la causan. En las mujeres, estas verrugas aparecen en la parte externa e interna de la vagina, en el cuello del útero, y en la zona perianal. En los hombres no suelen aparecer tan comúnmente, pero si lo hacen, aparecen en la punta y base del pene, en el escroto, y en la zona perianal.
En muy raras ocasiones, pueden aparecer verrugas en la boca y la garganta si ha habido sexo oral con una persona infectada.

Podemos concluir entonces que los principales signos son:
  • Carencia de síntomas
  • Verrugas en la piel
  • Verrugas en la boca y garganta
  • Verrugas en genitales y anales
Cabe señalar, que aunque no aparezcan signos ni síntomas, es muy importante tratarse y detectarse esta enfermedad ya que tiene altas posibilidades de convertirse en cáncer. 



VIRUS DEL PAPILOMA HUMANO - VPH

Los VPH, virus del papiloma humano, son un conjunto de virus relacionados entre sí. Existen más de 200 tipos. Alrededor de 40 de ellos afectan a los genitales y pueden causar verrugas en diferentes partes del cuerpo. Estos virus se contraen a través del contacto sexual con una persona infectada. Generalmente, este virus es inofensivo y desaparece solo pero algunos tipos pueden poner a la persona en riesgo de desarrollar un cáncer.



Podemos encontrar dos tipos de VPH transmitidos por contacto sexual. Los VPH de bajo riesgo (los tipos 6 y 11) provocan verrugas genitales mientras que los VPH de alto riesgo (sobre todo los tipos 16 y 18)  puede causar varios tipos de cáncer, entre los que están:

  • Cáncer de cuello uterino
  • Cáncer de ano
  • Algunos tipos de cáncer oral y de garganta
  • Cáncer de vulva
  • Cáncer de vagina
  • Cáncer del pene

Aunque algunas personas desarrollan verrugas genitales otras personas no muestras ningún síntoma, de modo que desconocen que están infectados. 
La mayoría de los infectados se cura a los 2-3 años sin desarrollar cáncer, pero algunas infecciones pueden persistir muchos años y provocar cambios en las células que, si no se tratan, pueden volverse cancerosas.



En las mujeres, las pruebas Papanicolaou pueden detectar cambios en el cuello del útero que pueden acabar convirtiéndose en cáncer. Estas pruebas, junto con los exámenes de VPH, son pruebas de detección del cáncer cervical.




Este virus se contagia fácilmente por contacto sexual. El contagio se produce cuando la vulva, la vagina, el cuello del útero, el pene o el ano, entra en contacto con los genitales o la boca y la garganta de otra persona que está infectada. Además, el VPH puede contagiarse sin que haya eyaculación y sin que el pene penetre en la vagina, el ano o la boca.

La infección por VPH no tiene cura pero para reducir el riesgo de contraerla es conveniente el uso de preservativos durante las relaciones sexuales. Además, las vacunas pueden proteger contra varios tipos de VPH, incluyendo algunos de los que provocan cáncer.
 

domingo, 26 de noviembre de 2017

TRATAMIENTO PARA LA CLAMIDIA

La clamidia es una enfermedad de transmisión sexual de fácil tratamiento, este se va a realizar por medio de antibióticos. La azitromicina y la doxiciclina son los más recomendados, la primera se administra en una sola dosis de 1 gramos mientras que la segunda se administran dos dosis diarias durante una semana. También hay que mencionar que si la infección es anal o en los pacientes con linfogranuloma venéreo,  se recomienda usar doxicilina y no azitromicina. 

Los pacientes infectados deben abstenerse de mantener relaciones sexuales durante al menos 7 días después del tratamiento. Todas las parejas que haya tenido el infectado debe someterse a las pruebas para detectar esta ETS, e incluso deberán someterse al tratamiento aunque no presenten síntomas

El cuadro clínico de esta enfermedad es muy similar al de otra ETS, la gonorrea, por lo que en muchos casos si se padece una o la otra se le dará a la persona un tratamiento para curar ambas, los antibióticos más utilizados en estos casos son la azitromacina y la ceftriaxona. 

Si se da el caso de que una persona con clamidia no recibe el tratamiento adecuado se pueden presentar una serie de complicaciones.Las mujeres por una parte pueden desarrollar una EPI (enfermedad pélvica inflamatoria), que puede llevar a provocar esterilidad, embarazos en las trompas de falopio, dolor pélvico crónico y más. Por otra parte en los hombres puede provocar infecciones uretrales e hinchazón y dolor en los testículos. Por lo que si una persona sospecha de que puede sufrir esta infección consulte con su médico lo antes posible.


Para más información puede consultar esta 
página: https://www.health.ny.gov/es/diseases/communicable/chlamydia/fact_sheet.htm


TRANSMISIÓN Y SÍNTOMAS DE LA CLAMIDIA

La clamidia se puede contraer practicando sexo oral, vaginal o anal con cualquiera que tenga la infección. Además, esta enfermedad también se puede transmitir de madre a hijo durante el parto.

El problema con esta ETS es que no presenta síntomas, y si lo hace, suele ser varias semanas después de haber mantenido relaciones con la persona infectada. Aunque la persona no presente síntomas, puede infectar a otras parejas.
Para asegurarse de que no tiene clamidia, se deben realizar pruebas de laboratorio con una muestra de orina, o muestras recogidas con un hisopo.

Los síntomas que pueden presentar las mujeres son:

  • Flujo vaginal anormal, que puede tener un olor fuerte
  • Sensación de ardor al orinar
  • Dolor durante las relaciones sexuales
  • Si la infección se propaga, puede haber dolor abdominal bajo, nauseas o fiebre.

Los síntomas que presentan los hombres son:
  • Secreción del pene
  • Sensación de ardor al orinar
  • Ardor o picazón alrededor de la abertura del pene
  • Dolor e inflamación en uno o ambos testículos.

Si la clamidia afecta al recto, puede aparecer dolor o sangrado tanto en hombres como en mujeres. 

QUÉ ES Y COMO SE CONTRAE LA CLAMIDIA

La clamidia es una enfermedad de transmisión sexual causada por la bacteria Chlamydia trachomatis. Puede afectar tanto a hombres como a mujeres. En el caso de las mujeres pueden contraer clamidia en el cuello del útero, en el recto o en la garganta. Por otra parte, los hombres pueden contraer clamidia en la uretra, en el recto o en la garganta.

 Esta es una de las ETS más comunes pero la mayoría de las personas no presentan síntomas. Puede provocar daños en el aparato reproductor femenino haciendo más difícil o imposible que la mujer se quede embarazada en el futuro. Además, también puede causar un embarazo ectópico, es decir, que ocurre fuera del útero, lo que puede ser mortal.




La clamidia se puede contraer a través del sexo oral, vaginal o anal con una persona que esté infectada. La bacteria se encuentra en el esperma, el líquido preeyaculatorio y las secreciones vaginales. Como ya dijimos, esta infección puede afectar al pene, la vagina, el cuello uterino, el ano, la uretra, los ojos y la garganta. Además la mujer puede contagiar la clamidia al feto durante el parto.






La clamidiasis se cura fácilmente con antibióticos pero puede traer problemas graves de salud en el futuro si no se trata. Es por esto que es importante realizar pruebas de ETS. Cuanto antes se detecte la enfermedad, más pronto se curará.


sábado, 25 de noviembre de 2017

TRATAMIENTO DE LA GONORREA

El tratamiento para curar la gonorrea es muy simple y se va a realizar de la misma forma tanto en hombres como en mujeres. Este tratamiento consta de una única dosis de antibióticos, los más utilizados son: la Ceftriaxona intramuscular o Ciprofloxacino por vía oral. También se podría utilizar la Azitromicina pero puede provocar efectos secundarios por lo que no se utiliza tanto. 

Las personas que sufran esta enfermedad deben ser siempre investigadas y tratadas, se indicará abstinencia sexual hasta que ya no tengan síntomas. En caso de que sean asintomáticos se debe evitar mantener relaciones durante una semana después del tratamiento. Este tipo de infección se puede sufrir más de una vez.

En caso de padecer gonorrea se debe siempre consultar a un profesional sanitario y nunca se automedique, ya que la gonorrea puede mostrar multiresistencia a los medicamentos, lo que provoca que esta ETS sea difícil de tratar con los tratamientos habituales, por lo que si se da el caso de que usted se haya infectado debe siempre seguir las recomendaciones tanto de su farmacéutico como de su médico para conseguir el mayor beneficio posible.


TRANSMISIÓN Y SÍNTOMAS DE LA GONORREA

TRANSMISIÓN

La gonorrea es una enfermedad de transmisión sexual que se transmite al practicar sexo sin protección. Se puede transmitir tanto por sexo oral, vaginal como rectal.

Esta enfermedad también puede ser transmitida por la madre al feto durante el embarazo aunque se puede tomar medicación durante el embarazo para proteger a la madre y al bebé.

Si la enfermedad no se coge a tiempo durante el embarazo puede ser muy peligroso para el bebé pues podría nacer con ceguera por lo que es importante acudir rápidamente al médico si se sospecha de un posible contagio.



SÍNTOMAS

Los síntomas de la gonorrea suelen aparecen entre 2 y 5 días después del contagio, aunque en los hombres los síntomas pueden tardar hasta un mes en aparecer. Cabe destacar que hay personas que tras contagiarse no presentan ningún síntomas y , por lo tanto, desconocen que están infectados y no se someten a ningún tratamiento lo que puede traer consecuencias muy graves.

Síntomas en los hombres:

  • Dolor al orinar
  • Aumento de la frecuencia urinaria
  • Secreción del pene que puede ser de color blanco, amarillo o verde
  • Uretra roja o inflamada
  • Testículos sensibles o inflamados
  • Dolor de garganta 

Síntomas en las mujeres:

Los síntomas pueden ser muy leves y se pueden confundir con otro tipo de infección. Estos son:

  • Dolor y ardor al orinar
  • Dolor de garganta
  • Relaciones sexuales dolorosas
  • Dolor intenso en la parte baja del abdomen, si la infección se extiende a las Trompas de Falopio y a la zona del estómago
  • Fiebre

Además, si la infección pasa al torrente sanguíneo aparecen otros síntomas entre los que encontramos:

  • Fiebre
  • Salpullido
  • Síntomas similares a los de la artritis
  • Secreciones vaginales de color verde o amarillento o con mal olor



¿QUÉ ES LA GONORREA?

La gonorrea es una enfermedad de transmisión sexual causada por una bacteria llamada Neisseria gonorrheae. Esta enfermedad afecta tanto a los genitales, al recto, como a la garganta, y es muy común  tanto en hombres como en mujeres jóvenes de entre 15 a 24 años.


Esta ETS se puede evitar manteniendo relaciones seguras con preservativos de látex y diques dentales, y evitando las relaciones espontáneas sin saber el estado serológico de la pareja.

Por todo esto, es recomendable hacerse una prueba de detección de la gonorrea una vez al año, especialmente si se trata de una mujer joven, o de un hombre homosexual o bisexual. Esta prueba se puede realizar en la mayoría de los casos con una muestra de orina, aunque también se pueden recoger muestras de la garganta y recto con un hisopo.

Afortunadamente, esta enfermedad es una enfermedad curable haciendo un uso correcto e individual de los medicamentos recetados. Aún así, cada vez es más difícil tratar algunos casos debido al aumento de las cepas resistentes a los medicamentos. Por otro lado, el tratamiento no podrá reparar ninguna lesión permanente que haya causado la enfermedad.

En el caso de que la enfermedad no se tratara, podría llegar a causar infertilidad en hombres o la enfermedad inflamatoria pelvica en mujeres (EIP). En casos extremos en que la gonorrea no se tratara, la enfermedad podría propagarse a la sangre o las articulaciones, pudiendo ser mortal para la persona. 
Por otro lado, no tomarse el tratamiento puede aumentar las probabilidades de contraer y transmitir el VIH.

viernes, 24 de noviembre de 2017

TRATAMIENTO CONTRA LA SÍFILIS


Afortunadamente, la sífilis es una enfermedad tratable, especialmente en sus escenarios primarios y secundarios. El tratamiento de elección en estos casos es una dosis simple de penicilina G. Si se trata en cambio de la fase 3 de la enfermedad, se deberá administrar el antibiótico tres veces a la semana con una semana de separación.

En el caso de que la paciente estuviera embarazada, el tratamiento debe ser igual, variando solamente según la fase de la enfermedad. Si la madre cumple correctamente el tratamiento durante el embarazo, el riesgo de infección al bebé es mínimo, aunque se deben realizar exámenes mensualmente después del parto.
En el caso de que el bebé si que naciera con la infección (sífilis congénita), se deberá aportar un tratamiento estricto de antibióticos cada 12 horas durante una semana.

Una pequeña parte de la población sometida a este tratamiento, puede desarrollar una reacción a los antibióticos conocida como Jarisch-Herxheimer, que puede causar fiebre, dolores de cabeza y músculos.

Al terminar el tratamiento se realizan seguimientos clínicos y serológicos para confirmar la curación, aunque el fracaso del tratamiento no es muy frecuente.

Cabe señalar, que todas las parejas sexuales que tubo el paciente los 90 días anteriores al diagnóstico, deben ser determinados, probados y tratados en los casos necesarios.

CAUSAS, TRANSMISIÓN Y SÍNTOMAS DE LA SÍFILIS

La sífilis es una ITS, es decir, una infección de transmisión sexual que está causada por una bacteria denominada Treponema pallidum. Esta bacteria penetra en la piel o en las membranas mucosas rotas, generalmente de los genitales y provoca la infección.

TRANSMISIÓN

La sífilis se contagia mayoritariamente mediante el contacto sexual. Se produce el contagio cuando la vulva, la vagina, el pene, el ano o la boca entra en contacto con las llagas de una persona infectada de sífilis. Debemos tener en cuenta que la sífilis se puede contagiar aun cuando no hay eyaculación.

Se contagia sobre todo mediante sexo vaginal y sexo anal, es menos frecuente que se contagie a través del sexo oral pero aún así puede ocurrir. Además, la madre puede contagiar la sífilis al bebé durante el embarazo y el nacimiento.

SÍNTOMAS

Para hablar de los síntomas de la sífilis vamos a dividirlo en las tres etapas que presenta esta enfermedad.

Sífilis primaria

El período de incubación de la sífilis primaria es de 14 a 21 días. 
Chancro


Presenta los siguientes síntomas:
  • Una pequeña úlcera o llaga abierta e indolora, llamada chancro, en los genitales, la piel, la boca o el recto. Esta se cura por sí sola en aproximadamente 3-6 semanas.
  • Inflamación de los ganglios linfáticos en la zona de la llaga.




Aunque la enfermedad presenta pocos síntomas hasta que entra en la segunda etapa, durante este tiempo, la bacteria continúa multiplicándose.



Sífilis secundaria

Los síntomas empiezan a aparecer entre 4 y 8 semanas después de la sífilis primaria. Entre ellos encontramos:
  • Fiebre
  • Indisposición general
  • Falta de apetito
  • Dolores musculares y articulares
  • Inflamación de los ganglios linfáticos
  • Cambios en la visión
  • Pérdida de pelo
  • Erupción cutánea en las palmas de las manos y en las plantas de los pies
  • Úlceras llamadas parches mucosos en la boca, la vagina o el pene (o alrededor de estas)
  • Parches húmedos y verrugosos, denominados condilomas sifilíticos, en los genitales o en los pliegues de la piel

Erupciones cutáneas

Condilomas sifilíticos 



Sífilis terciaria

Esta se desarrolla en personas que no han sido sometidas a tratamiento. Los síntomas van a depender de los órganos que hayan sido afectados, de modo que pueden varíar y pueden ser difíciles de diagnosticar. Entre estos síntomas encontraremos:

  • Daño al corazón que causa aneurismas o valvulopatía
  • Trastornos del sistema nervioso central 
  • Tumores de la piel, los huesos o el hígado



ORIGEN E HISTORIA DEL SÍFILIS


La palabra sífilis proviene del griego siph, que significa cerdo y philus que significa amor. Esta enfermedad ha tenido múltiples nombres a lo largo de la historia, como venéreo, pudendagra de Torella, enfermedad de las bubas en España... entre otros.

El término que conocemos hoy en día fue introducido por un médico veronés: Girolamo Fracastoro, que publicó en 1530 un poema donde se describía la enfermedad y propuso ese nombre en honor a un pastor llamado Syphilo que fue castigado por Apolo a sufrir una enfermedad por blasfermar al dios del sol, Apolo.  En el siglo XIX se adoptó el término sífilis definitivamente.

Durante la Edad Media, la sífilis provocó estragos semejantes a los de la peste, y devastó pueblos y ciudades enteras. A principios del siglo XVI la sífilis se consideraba un mal innombrable. La iglesia lo llegó a considerar como un castigo divino.

El dicho "Una noche con Venus y una vida con Mercurio", utilizado en la antigüedad, hacia referencia a que a las personas que se infectaban de esta enfermedad se les trataba con mercurio, el cual resultaba muy tóxico, lo que provocaba que muchas personas muriesen por el mercurio y no por la enfermedad. La utilización de mercurio para tratar esta enfermedad se continuó hasta comienzos de la Segunda Guerra Mundial, donde se cambia el mercurio por el bismuto, que se consideraba más eficaz.

El hallazgo de lesiones en los esqueletos obtenidos en excavaciones arqueológicas provocadas por la sífilis divide a los investigadores en 2 grandes grupos: unos sitúan el origen de esta enfermedad en América y otros lo sitúan en Europa, Cercano Oriente y África.

Hoy en día la sífilis se puede tratar mediante inyecciones, siempre y cuando el tiempo de infección sea menos de un  año, y se puede eliminar completamente.


TRATAMIENTO DEL SIDA

Aunque el SIDA continua siendo una enfermedad incurable, se han desarrollado una serie de medicamentos que permiten al afectado conseguir una vida prácticamente normal. Estos medicamentos son los denominados antiretrovirales, que tienen la función de impedir el replicamiento de los virus del VIH, consiguiendo por tanto, un aumento en el recuento de glóbulos blancos, y una reducción de la transmisión del virus.

El tratamiento contra el sida debe comenzar cuanto antes, especialmente si se trata de una paciente embarazada, un paciente que ya tenga otras enfermedades relacionadas con el SIDA, o los pacientes en un estado muy temprano de VIH. Dependiendo de las características de cada persona, se elegirá uno de los seis régimes de tratamiento posibles.


Aunque este tratamiento tiene muchos beneficios en la persona, también tiene algunos riesgos:



  • Efectos secundarios: Aunque el medicamento actúa totalmente diferente en cada persona, se han recogido una serie de efectos comunes: dolor de cabeza o mareos, inflamación de la garganta y lengua, o lesiones en el hígado.
  • Interacciones medicamentosas: En un régimen para el tratamiento del SIDA, los medicamentos pueden interactuar con otros medicamentos del mismo tipo, o con vitaminas o suplementos nutricionales. Esto puede causar una disminución o aumento del efecto del medicamento en el cuerpo, o causar otros efectos secundarios indeseados.
  • Resistencia a los medicamentos: En ciertos casos, el virus del VIH puede mutar dentro del cuerpo, llegando a causar cepas resistentes a los medicamentos. El incumplimiento del tratamiento contra esta enfermedad, aumenta las posibilidades de que haya una mutación en el virus, y por tanto que aparezca resistencia y fracaso del tratamiento.





jueves, 23 de noviembre de 2017

SÍNTOMAS DEL VIH/SIDA

Como ya comenzamos a explicar en entradas anteriores, las personas que se infectan con VIH no empiezan a tener síntomas inmediatamente si no que se sienten sanas durante mucho tiempo. Cuando una persona se infecta, empieza a mostrar una serie de síntomas entre 2 y 4 semanas después de la infección pero estos  no son importantes, por eso decimos que se sienten sanas. Entre estos síntomas, que son similares a los de la gripe, podemos encontrar:


  • Fiebre y dolor muscular
  • Dolor de cabeza
  • Dolor de garganta
  • Sudoración nocturna
  • Úlceras bucales
  • Ganglios linfáticos inflamados
  • Diarrea
  • Incluso infección por hongos (candidiasis)
           
        Candidiasis



 
Úlceras bucales
                               

Durante estas primeras semanas, hay una gran concentración de virus en nuestro organismo de modo que es más fácil transmitirlo a otras personas. La infección aguda por VIH progresa durante semanas, incluso meses, hasta convertirse en una infección asintomática, es decir, sin síntomas. Esta etapa puede prolongarse durante 10 años o más, es por esto que las personas no tienen ninguna razón para sospechar que están infectadas.

Es importante recordar que una persona infectada, es decir, que porta el virus, puede transmitirlo a otras personas independientemente de si presenta síntomas o no.

SÍNTOMAS TARDÍOS DEL SIDA

Como ya sabemos, el VIH destruye las células del sistema inmunitario conocidas como células T4. Sin estas células nuestro organismo presenta dificultades para combatir las enfermedades, lo que hace que sea más propenso a enfermar gravemente por onfecciones que normalmente no causarían daños.





Una persona presenta SIDA cuando contrae infecciones ``raras´´, denominadas enfermedades oportunistas, ciertos tipos de cáncer o tiene un recuento bajo de células T4 en la sangre.

Una vez que la infección avanza y se desarrolla el SIDA, podemos encontrar diferentes señales entre las que están:

  • Aftas (revestimiento espeso y blanco en la lengua o la boca)
  • Dolor de garganta
  • Infecciones graves por hongos
  • Enfermedad pélvica inflamatoria crónica 
  • Cansancio persistente, mareos y aturdimiento
  • Infecciones graves recurrentes
  • Dolores de cabeza
  • Pérdida brusca de peso
  • Formación de hematomas con más frecuencia de lo normal
  • Diarrea, fiebre, o sudores nocturnos durante mucho tiempo
  • Glándulas inflamadas o duras en la garganta, las axilas o la ingle
  • Episodios de tos seca y profunda
  • Sensación de falta de aire
  • Protuberancias violáceas en la piel o en la boca
  • Sangrado de la boca, la nariz, el ano o la vagina
  • Adormecimiento de las manos o los pies
  • Pérdida del control sobre los músculos y los reflejos
  • Incapacidad de movimiento
  • Pérdida de fuerza muscular
  • Erupciones de la piel




PRUEBA DEL VIH


La prueba del VIH nos permite comprobar si una persona ha contraído la infección por ese virus. Aunque estas pruebas nos permiten detectar la infección por VIH no pueden determinar cuanto tiempo la persona ha padecido o incluso si tiene SIDA. La importancia de estas pruebas es que le van a permitir a la persona a mantenerse seguro y a mantener a otros seguros. 

En la mayor parte de los casos, las pruebas del sida constan de 2 pasos: 

  •  Las pruebas de detección: dentro de estas encontramos varios tipos de pruebas.  Algunas son  pruebas de sangre, mientras que otras se pueden realizar examinando los líquidos bucales.  Ambas van a buscar el antígeno VIH, anticuerpos en contra del virus e incluso los dos.  Algunos de estos exámenes nos pueden ofrecer los resultados en menos de media hora. 
  • Las pruebas de seguimiento: también conocidas con el nombre de pruebas de confirmación, se realizan cuando la prueba anterior tiene un resultado positivo.

Existen algunas pruebas caseras para detectar el VIH, pero si nos planteamos realizar alguna de estas tendremos primero que comprobar si están aprobadas por la FDA y habrá que seguir las instrucciones dadas para obtener un resultado los más preciso posible. 


Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan que las personas entre 15 y 65 años, embarazadas o con comportamientos de riesgo realizan las pruebas de detección de VIH. 


Después de realizar las pruebas se pueden obtener dos resultados distintos : seronegativo y seropositivo. La primera determina que la persona no está infecctado por el VIH. Mientras que la segunda, determina que la persona que realizó esa prueba sí está infectado por el virus, aún así se pueden adoptar una serie de medidas para proteger la salud de esa persona, como el uso de tratamientos antirretrovirales, la realización de análisis periódicos de sangre para verificar el conteo de células CD4, entre otras. 

Finalmente incluímos un vídeo donde nos explican como se realizan las pruebas de sangre del VIH.




miércoles, 22 de noviembre de 2017

ORIGEN E HISTORIA DEL SIDA

Actualmente, se cree que el SIDA se originó en África, debido a que allí residen monos y simios con un virus similar llamado SIV. Aun así, sigue siendo una incógnita como el virus puedo cruzar la barrera de las especies. La teoría más extendida es que los humanos contrajeron la enfermedad a partir de la caza y alimentación de estos animales infectados, dando lugar al virus en humanos alrededor de 1930.

El sida no fue descubierto hasta la década de los 80 cuando médicos estadounidenses observaron cepas de enfermedades muy poco habituales. En un principio se asoció la enfermedad con la homosexualidad, aunque pronto se empezaron a detectar casos entre los drogadictos y los receptores de transfusiones sanguíneas. Finalmente, en el 1982 se le puso nombre a la enfermedad: SIDA o síndrome de inmunodeficiencia adquirida.
Actualmente, esta enfermedad está extendida globalmente, y ha causado cerca de tres millones de muertes y 39,5 millones de afectados.

SÍNDROME DE LA INMUNODEFICIENCIA ADQUIRIDA - SIDA

Para empezar a hablar de esta enfermedad debemos establecer la diferencia entre VIH y SIDA.

 El VIH es un virus, el virus de la inmunodeficiencia humana, que provoca la infección de las células del sistema inmunitario y las destruye o provoca un trastorno de su funcionamiento. Concretamente afecta a los linfocitos T4. De este modo, se produce un deterioro progresivo del sistema inmunitario y acaba produciendo una deficiencia inmunitaria.

Por otro lado, el SIDA es el estado avanzado de la enfermedad producida por el VIH.

Así, podemos decir que una persona está infectada por VIH cuando el virus está en su organismo pero no presenta síntomas y desarrolla SIDA cuando el recuento de linfocitos T4 es menos de 200 células por mililitro cúbico de sangre y presenta manifestaciones clínicas de la enfermedad.

Cabe destacar que las personas que tienen VIH aunque no presenten síntomas también son portadoras y pueden transmitir el virus, no solo las personas que presentan SIDA.

El VIH se transmite principalmente a través de los fluídos corporales. A través de las relaciones sexuales sin protección, tanto vaginales, anales como orales, por la transfusión de sangre contaminada y, también, por compartir agujas, jergingas o cualquier objeto cortopunzante que esté infectado. Además, la madre puede transmitirle la infección al hijo durante el embarazo, el parto e incluso durante la lactancia.

Cuando una persona presenta VIH si no está sometida a tratamiento tardará entre 5 y 10 años en desarrollar signos y síntomas de la enfermedad.





Para saber con seguridad si una persona tiene VIH debe realizarse las pruebas oportunas. Es recomendable realizar estas pruebas si se mantuvieron relaciones sexuales sin protección o si la prueba de la pareja es positiva. También se debe realizar si se compartieron agujas, jeringuillas u otros objetos cortopunzantes. En caso de estar embarazada es conveniente realizar la prueba en la primera consulta prenatal.

Es importante saber que no existe una cura para el VIH sin embargo, un buen tratamiento con antirretrovíricos reduce la evolución de la infección hasta casi detenerla.
Los antirretrovíricos son productos que actúan al detener o alterar la reproducción del virus en el organismo, lo que disminuye la carga vírica.

Una de las enfermedades o infecciones que más afecta a las personas que presentan VIH es la tuberculosis. De hecho, es una de las principales causas de muerte en personas con este virus. Existen una serie de métodos que son importantes para prevenir y tratar la tuberculosis en personas con VIH:

  • El examen sistemático en busca de síntomas de tuberculosis en cada consulta
  • El tratamiento de la tuberculosis latente
  • El control de la infección tuberculosa
  • El inicio temprano de tratamiento con antrirretrovíricos